11 mayo 2011

impostor de ti mismo

admiro la forma en que tus tristes ojos humillan ese halo de vanidad.
creo en tu egocentrismo y en cómo esa sonrisa de niño manipula mi mente.
aquellas frases tuyas llenas de prepotencia que me dejan al borde de la vida.
odio el modo en cómo me miras cuando llenas mis huecos de tu lucha interna.
es tu laconicidad que empuja mis latidos e inunda de pureza tus palabras.

amor estúpido, ingrato, hedonista e impenetrable a ritmo de desveladas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario